El merchandising es un elemento fundamental en la estrategia de ventas de las tiendas retail. Se trata de una técnica que busca, a través de la presentación y disposición de productos en el punto de venta, influir en el comportamiento de los consumidores y aumentar las ventas.
Objetivos del merchandising en el sector retail
El objetivo principal del merchandising es atraer la atención de los clientes, generar interés por los productos y motivar la compra. Para lograrlo, se utilizan diferentes técnicas como la correcta organización de los productos en los estantes, la utilización de colores llamativos y la creación de ambientes atractivos que inviten a los clientes a permanecer más tiempo en la tienda.
En este sentido, el merchandising se convierte en una herramienta estratégica para las tiendas retail, ya que permite destacar los productos y diferenciarse de la competencia. Y es que, a través de una correcta presentación y exposición de los productos, se puede crear una experiencia de compra única que fomente la fidelización de los clientes.
Además, el merchandising no solo se limita a la presentación de productos físicos, sino que también incluye la creación y gestión de espacios promocionales, la utilización de materiales de comunicación visual y la planificación de campañas de marketing en el punto de venta.
En este sentido, es fundamental que las tiendas retail cuenten con profesionales especializados en este ámbito, capaces de diseñar estrategias efectivas y creativas que impulsen las ventas. Estos profesionales deben ser capaces de analizar el comportamiento de los consumidores, identificar tendencias y adaptar la presentación de los productos a las necesidades y preferencias de los clientes.
Tácticas de merchandising en retail
Según diferentes estudios, el 40% de los clientes tienen una idea predeterminada de lo que quieren comprar, pero muchos de ellos cambian de opinión en base a lo que ven en las tiendas. Y es que existen algunas tácticas de merchandising que influyen en el comportamiento de los consumidores.
Distribución de una tienda. La distribución juega un papel fundamental en los resultados de ventas. Normalmente en la parte delantera de un establecimiento se suelen exponer productos que se quieren vender ya que estos son los primeros que ve un cliente cuando entra. Además, también se suele utilizar una táctica basada en dejar 5 metros despejados desde que el consumidor entra en el establecimiento. Esta área es conocida como zona de descompresión y es la transición física y psicológica que el cliente sufre al adentrarse en el interior del establecimiento.
Organización de productos. La colocación de productos ha de tener sentido entre sí. No se han de mezclar productos o colecciones ya que esto hará que el consumidor se confunda.
Experiencia de compra. Hay que tener en cuenta el Costumer Journey de los clientes para aportarles la mejor experiencia. Para ello es recomendable destacar los productos más representativos nada más entrar a un establecimiento (creando, por ejemplo, una mesa o un estante de bienvenida), incluir productos en “zonas calientes” como la entrada, la zona de caja o los probadores, regalar artículos de la marca para convertir a los clientes en embajadores y utilizar un buen packaging. Asimismo, contar con la música, la iluminación, y los aromas correctos en tu establecimiento influye de manera positiva en la experiencia de los usuarios.
En conclusión, el merchandising es una herramienta clave en la estrategia de ventas de las tiendas retail y utilizar estas y otras técnicas de venta, o también inteligencia de mercado, puede ser muy efectivo para cualquier negocio.