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Las marcas blancas se consolidan en los supermercados

marcas blancas

Las marcas propias, conocidas como marcas blancas, son productos que han sido elaborados por proveedores de primer nivel. Esto ha supuesto que, durante la última década, hacer la compra salga más rentable y económica. Tanto es así que, el hecho de adquirir productos de marca blanca, se ha convertido en gran medida en el gran reclamo del público que aboga por la economía y la inteligencia doméstica.

Las marcas blancas han sido diseñadas por los mismos proveedores que fabrican para las importantes marcas comerciales. Desde Metafase, como profesionales de la venta externa, afirmamos que el resultado de ambos casos es realmente bueno y apenas hay diferencia. Por tanto, si el producto está igual de rico y su objetivo es el mismo ¿Por qué sería necesario pagar más?

Cabe destacar que, la mayoría de las grandes superficies que operan en España comercializa su propia línea de productos. Es uno de los canales de comercialización más potentes de los productos propios. Mercadona, Carrefour y Corte Inglés tienen sus propias marcas blancas y su consumo es cada vez más habitual. La combinación de la calidad-precio hace que todos estos productos sean un éxito. En concreto, Mercadona es la que más productos vende en los estantes de su establecimiento.  Bajo un marco que se crea para la ocasión, los supermercados venden la misma calidad que otro producto exactamente igual, pero a un precio más económico.

Todas estas marcas blancas no tienen publicidad. Además, no precisan de grandes inversiones para hacerse un hueco y darse a conocer. Su único marketing es que el usuario encuentre éstos al lado de la competencia directa. Pero no todo el público está habituado al consumo de estas marcas blancas. Hay productos que automáticamente la persona se va a la marca sin dudar en ningún momento. Es el caso de la coca cola que, por muchas líneas de productos que se hayan creado similares, nunca van a ser competencia. Sin embargo, hay otros casos, como los productos de limpieza, que el concepto de marca original no se tiene tanto en cuenta, ganando terreno las marcas blancas. Otro ejemplo son las comidas enlatadas, las cuales el usuarios se centra directamente en el precio más económico, traduciéndose en la adquisición de la marca blanca.

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